Ualabí de Bennet

Macropus rufogriseus

Nombre común

Ualabí de Bennet / Ualabí de cuello rojo

Hábitat

Bosques de eucalipto, matorrales costeros y áreas abiertas cercanas a cuerpos de agua.
Características

Familia

Macropodidae

Orden

Diprotodontia

Clase

Mammalia

Gestación

29 días

Nº de crías

1

P. Reproducción

Dieta

Se alimenta principalmente de pastos, hojas, raíces y hierbas.

Vida

En libertad: 15 años. En cautividad: hasta 18 años.

Biología y comportamiento

El ualabí de cuello rojo (Macropus rufogriseus) es un marsupial de tamaño mediano perteneciente a la familia Macropodidae. Se caracteriza por su pelaje grisáceo con una distintiva tonalidad rojiza en el cuello y hombros, de donde proviene su nombre común. Posee una cabeza pequeña, orejas largas y una cola robusta que utiliza para mantener el equilibrio al desplazarse mediante saltos. Sus patas traseras son fuertes y adaptadas para el salto, mientras que las delanteras son más pequeñas y utilizadas para manipular alimentos. La especie presenta dimorfismo sexual, siendo los machos significativamente más grandes que las hembras. Su dentición está adaptada para una dieta herbívora, compuesta principalmente por pastos y hojas. Habita en una variedad de entornos, desde bosques de eucalipto hasta matorrales costeros, mostrando una notable adaptabilidad a diferentes hábitats. Su capacidad para sobrevivir en áreas modificadas por el ser humano ha facilitado su expansión a nuevas regiones, incluyendo algunas introducciones exitosas fuera de su rango nativo.

Este marsupial es principalmente solitario, aunque puede formar grupos temporales en zonas de alimentación abundante. Es una especie crepuscular y nocturna, siendo más activa durante las horas del amanecer y el atardecer. Durante el día, busca refugio en áreas sombreadas o densamente vegetadas para descansar. Su locomoción se basa en saltos impulsados por sus poderosas patas traseras, utilizando la cola como soporte y equilibrio. Aunque generalmente tranquilo, puede mostrar comportamientos agresivos durante la temporada de apareamiento, especialmente entre machos compitiendo por hembras. La comunicación entre individuos incluye vocalizaciones suaves, posturas corporales y golpes con las patas traseras en el suelo como señal de alarma. Su comportamiento territorial es limitado, y muestra una notable tolerancia a la presencia humana, lo que ha facilitado su adaptación a entornos periurbanos.

Clasificado como “Preocupación menor” por la UICN, el ualabí de cuello rojo mantiene poblaciones estables en su rango nativo. Su adaptabilidad a diversos hábitats, incluyendo áreas modificadas por el ser humano, ha contribuido a su éxito poblacional. Sin embargo, enfrenta amenazas localizadas como la pérdida de hábitat debido a la expansión agrícola y urbana, y la caza en regiones donde se considera una plaga agrícola. Las colisiones con vehículos representan otro riesgo en zonas periurbanas. Aunque no está incluido en los apéndices de CITES, su presencia en numerosos zoológicos y reservas naturales ha facilitado programas de reproducción en cautividad. La introducción de esta especie en regiones fuera de su rango nativo ha tenido resultados mixtos, siendo exitosa en algunos casos y problemática en otros. La vigilancia continua y la gestión adecuada son esenciales para asegurar su conservación a largo plazo.

Algunas
curiosidades

El nombre “ualabí de Bennett” hace referencia a la subespecie que habita en Tasmania (Macropus rufogriseus rufogriseus), que presenta una adaptación más robusta al clima frío en comparación con su pariente continental.

A pesar de su apariencia tímida, es capaz de defenderse eficazmente con patadas de sus patas traseras si se ve acorralado.

Utiliza su cola como “quinto miembro” para equilibrarse, pero también para apoyarse al desplazarse lentamente en terrenos estrechos.

Puede realizar saltos de hasta 3 metros de largo y 1,5 metros de altura con facilidad.

En algunas zonas rurales del Reino Unido y Francia, existen poblaciones asilvestradas estables, producto de escapes o liberaciones accidentales de colecciones privadas.

Su pelaje cambia de tono con las estaciones, siendo más denso y rojizo en invierno en las zonas más frías.

Aunque es una especie mayoritariamente solitaria, se ha observado que mantiene interacciones pacíficas con otros ualabíes en zonas de alimentación compartida.

Tiene un sistema reproductivo que le permite mantener un embrión latente (diapausa embrionaria) si ya hay una cría en el marsupio, lo que optimiza la reproducción en condiciones favorables.

Las crías permanecen en el marsupio durante unos 280 días y luego siguen mamando fuera hasta los 12 meses.

Se ha vuelto una especie emblemática en zoológicos europeos por su carácter tranquilo y fácil adaptación a climas templados.

Sus vocalizaciones son escasas y suaves, aunque pueden emitir toses cortas en señal de alarma.

Su olfato está muy desarrollado y lo utiliza tanto para la selección de alimento como para reconocer a otros individuos.