Macaco cangrejero

Macaca fascicularis

Nombre común

Macaco cangrejero / Macaco de cola larga

Hábitat

Bosques tropicales húmedos, manglares, áreas costeras, zonas agrícolas y áreas urbanas.
Características

Familia

Cercopithecidae

Orden

Primates

Clase

Mammalia

Gestación

Aproximadamente 165 días

Nº de crías

1 por camada

P. Reproducción

Presente en numerosos núcleos zoológicos y centros de investigación.

Dieta

Se alimenta de frutas, hojas, semillas, insectos, pequeños vertebrados y, ocasionalmente, cangrejos y otros animales acuáticos.

Vida

En libertad: Hasta 30 años. En cautividad: Hasta 39 años

Biología y comportamiento

El macaco cangrejero (Macaca fascicularis) es un primate de tamaño mediano perteneciente a la familia Cercopithecidae. Se caracteriza por su pelaje grisáceo o marrón y una larga cola no prensil que supera la longitud de su cuerpo. Su rostro es alargado, con una cara sin pelo y ojos expresivos. Presenta un marcado dimorfismo sexual, siendo los machos significativamente más grandes que las hembras. Habita en una variedad de entornos, desde bosques tropicales hasta áreas urbanas, mostrando una notable adaptabilidad a diferentes hábitats. Su dieta omnívora incluye frutas, hojas, semillas, insectos y pequeños vertebrados, y es conocido por su habilidad para aprovechar recursos alimenticios en entornos antropogénicos. Esta adaptabilidad le ha permitido expandir su rango y sobrevivir en áreas con alta presencia humana.

El macaco cangrejero es una especie diurna y altamente social que vive en grupos matrilineales compuestos por múltiples hembras y sus crías, junto con algunos machos adultos. Los machos suelen emigrar de su grupo natal al alcanzar la madurez sexual. Estos grupos presentan una jerarquía social establecida, con interacciones complejas que incluyen acicalamiento, juegos y vocalizaciones para mantener la cohesión del grupo. Es conocido por su comportamiento oportunista, aprovechando recursos alimenticios en áreas urbanas y agrícolas, lo que a menudo genera conflictos con los humanos. Además, se ha observado el uso de herramientas simples, como el uso de piedras para abrir conchas o frutos duros, lo que demuestra un nivel de inteligencia notable entre los primates no humanos.

Actualmente, el macaco cangrejero está clasificado como “En Peligro” en la Lista Roja de la UICN debido a una disminución significativa de su población en las últimas décadas. Las principales amenazas incluyen la pérdida y fragmentación de su hábitat natural, la captura para el comercio de mascotas y su uso extensivo en investigaciones biomédicas. Además, su adaptabilidad a entornos urbanos ha llevado a frecuentes conflictos con humanos, resultando en persecuciones y caza en algunas regiones. Aunque está incluido en el Apéndice II de CITES, lo que regula su comercio internacional, se requiere una implementación más estricta de estas regulaciones para garantizar su conservación. Programas de reproducción en cautividad y esfuerzos de conservación in situ son esenciales para la supervivencia a largo plazo de esta especie.

Algunas
curiosidades

El nombre común “macaco cangrejero” proviene de observaciones en zonas costeras del sudeste asiático donde se ha registrado capturando y consumiendo pequeños cangrejos, aunque esta conducta es esporádica.

Es una de las pocas especies de primates no humanos que utiliza herramientas: algunos individuos han sido observados usando piedras para abrir mariscos, nueces o conchas.

Es el primate más ampliamente distribuido de Asia, habitando desde zonas costeras hasta selvas y áreas urbanas densas.

Su capacidad de adaptación al medio humano ha generado situaciones de “sinantropía”, es decir, convivencia cercana con asentamientos humanos.

En Bali y otras partes de Indonesia, se le encuentra frecuentemente en templos hindúes, como el famoso “Monkey Forest”, donde interactúa activamente con turistas.

Tiene una cola más larga que la de otras especies de macacos, lo que le confiere un excelente equilibrio al moverse entre ramas.

Exhibe una compleja jerarquía social con comportamientos de sumisión, coaliciones entre hembras y desplazamientos de rango.

Es común ver a las madres transportar a sus crías agarradas al abdomen, incluso nadando.

Es uno de los primates más buenos nadadores, capaz de cruzar ríos y canales usando brazadas coordinadas.

Puede emitir más de 20 tipos distintos de vocalizaciones para advertir de peligros, mantener cohesión del grupo o mostrar emociones.

A veces lava su comida antes de comerla, una conducta observada también en algunos macacos japoneses.

Ha sido sujeto de numerosos estudios etológicos, especialmente en relación con la cooperación, engaño y resolución de problemas.

Se ha documentado comportamiento de “robo y trueque” con turistas: toman objetos como gafas o gorras y los devuelven a cambio de comida.

En contextos urbanos, han aprendido a activar grifos, abrir puertas o manipular bolsas plásticas para obtener alimento.

En algunas culturas se considera un símbolo de fertilidad y sabiduría, mientras que en otras es visto como una plaga.

Posee glándulas odoríferas en el pecho y la región perineal, utilizadas para marcar territorio o estado reproductivo.

La longevidad y resistencia de esta especie la han convertido en una modelo animal clave en la biomedicina desde mediados del siglo XX.

Existen más de 10 subespecies reconocidas, con variaciones morfológicas según la región, entre ellas M. f. fascicularis (la más común).

En zonas rurales de Tailandia, se han reportado casos de cooperación entre individuos para obtener fruta de árboles altos mediante turnos.

En estudios de cognición, han demostrado reconocer su reflejo en el espejo tras entrenamientos, lo cual es raro en primates no hominoideos.