Guacamayo azul y amarillo

Ara ararauna

Nombre común

Guacamayo azul y amarillo / Guacamayo azulamarillo

Hábitat

Bosques tropicales y subtropicales, sabanas, bosques de galería, áreas pantanosas y zonas ribereñas.
Características

Familia

Psittacidae

Orden

Psittaciformes

Clase

Aves

Gestación

24–28 días

Nº de crías

2–3 huevos por nidada

P. Reproducción

Existen programas en núcleos zoológicos y reservas para su conservación y aprovechamiento sostenible.

Dieta

Se alimenta principalmente de frutas, semillas, nueces y vegetación. También puede consumir flores y cortezas. Su pico fuerte le permite romper cáscaras duras.

Vida

En libertad, hasta 35 años. En cautividad, supera los 50 años.

Biología y comportamiento

El guacamayo azul y amarillo (Ara ararauna) es una de las especies de psitácidos más emblemáticas de América del Sur. Su plumaje vibrante y su comportamiento social lo hacen fácilmente reconocible. Estas aves poseen un pico robusto adaptado para romper semillas y frutos duros, siendo esenciales en la dispersión de semillas en su ecosistema. Su lengua, áspera y musculosa, les permite manipular alimentos con precisión. Anidan en cavidades de árboles altos, especialmente en palmas del género Mauritia, donde la hembra incuba los huevos mientras el macho provee alimento. Los polluelos nacen altriciales, requiriendo cuidados parentales intensivos durante las primeras semanas. Su longevidad y capacidad de aprendizaje los han hecho populares en cautiverio, aunque esto ha contribuido a su captura ilegal.

Los guacamayos azul y amarillo son aves altamente sociales y monógamas, formando parejas de por vida. Fuera de la temporada de cría, se agrupan en bandadas que pueden incluir decenas de individuos, comunicándose mediante vocalizaciones fuertes y variadas. Estas vocalizaciones sirven para mantener la cohesión del grupo y alertar sobre posibles peligros. Durante el vuelo, las parejas vuelan juntas, a menudo con las alas casi tocándose. Son diurnos, con picos de actividad en las primeras horas de la mañana y al atardecer. Su comportamiento curioso y su capacidad para imitar sonidos los hacen destacar entre otras especies de aves.

Aunque el guacamayo azul y amarillo está clasificado como de “Preocupación menor” por la UICN, enfrenta amenazas significativas en varias partes de su rango. La deforestación para agricultura y ganadería ha reducido su hábitat natural, especialmente en regiones como Paraguay, donde está al borde de la extirpación. Además, la captura ilegal para el comercio de mascotas ha impactado negativamente sus poblaciones. Desde 1981, cuando fue incluido en el Apéndice II de CITES, se han registrado más de 55,000 individuos capturados en la naturaleza para el comercio internacional. Se han implementado programas de conservación y reproducción en cautiverio para mitigar estas amenazas, pero la protección efectiva de su hábitat y la aplicación de leyes contra el comercio ilegal son esenciales para su supervivencia a largo plazo.

Algunas
curiosidades

El nombre científico Ara ararauna proviene del tupí-guaraní, donde “ara” significa “ave” y “ararauna” se interpreta como “loro grande”.

A pesar de su apariencia llamativa, su plumaje azul y dorado le sirve como camuflaje en la luz moteada de los bosques tropicales.

Tienen una lengua musculosa con textura áspera que les ayuda a manipular y saborear alimentos, como nueces y semillas duras.

Son excelentes voladores, capaces de recorrer grandes distancias diarias en busca de alimento, con una envergadura de más de un metro.

Viven en parejas monógamas de por vida y suelen volar siempre en pareja, incluso en grandes bandadas.

Se comunican mediante fuertes vocalizaciones que pueden oírse a más de un kilómetro, útiles para mantenerse en contacto en la selva.

Los guacamayos muestran un alto grado de inteligencia y curiosidad, siendo capaces de resolver problemas simples y manipular objetos.

En su hábitat natural, juegan un papel importante en la dispersión de semillas, contribuyendo al mantenimiento de la biodiversidad.

Aunque no migran, pueden desplazarse según la estacionalidad de los frutos y recursos disponibles.

A menudo comparten sus árboles para dormir con otras especies de guacamayos y loros sin comportamientos agresivos.

Durante el cortejo, realizan rituales de acariciamiento con el pico y sincronización de movimientos en vuelo.

Su pico es tan fuerte que puede romper cáscaras de nueces de Brasil, una de las más duras del mundo vegetal.

Son uno de los psitácidos más utilizados en espectáculos y educación ambiental debido a su llamativo color y capacidad de interacción.

El comercio ilegal de esta especie fue tan alto que entre 1981 y 1990 se capturaron más de 55.000 individuos en libertad, razón por la cual está incluida en CITES Apéndice II.

Son capaces de imitar palabras humanas y otros sonidos, aunque no alcanzan la precisión del loro gris africano.

En algunas culturas amazónicas, su plumaje se utilizaba como símbolo de estatus o espiritualidad.

Pueden vivir más de 50 años en cautividad, convirtiéndose en compañeros de por vida en ambientes controlados.

Tienen una memoria visual destacable, lo que les permite recordar rutas y localizar árboles frutales visitados anteriormente.

En zoológicos y centros de conservación, requieren altos niveles de enriquecimiento ambiental para evitar comportamientos estereotipados.

Su conservación depende tanto de la protección del hábitat como del control del comercio ilegal y la educación sobre tenencia responsable.