Psittacidae
Psittaciformes
Aves
Febrero a junio, ~28 días, ambos padres comparten cuidados
1–4 por puesta, media ~2–3
Presente en zoológicos, pero sin programas formales de reintroducción
Frugívoro y granívoro, se alimenta principalmente de semillas (mayor porcentaje) y frutas, brotes y flores de al menos 33 especies arbóreas (ej. Ficus); también consume cultivos de maíz, banano, cacahuate…
En libertad: Similar a otras amazonas (~20–25 años) En cautividad: Pueden superar los 26 años
El loro corona lila es una especie de tamaño medio del género Amazona, con plumaje mayoritariamente verde claro, escamado en negro, y con una distintiva coloración azul-violácea en la corona, de donde recibe su nombre. Su frente y base del pico son de tono granate o rojizo oscuro, y la parte posterior del cuello muestra reflejos azul-púrpura. Tiene el iris ámbar en adultos y un pico fuerte, curvado y de color claro. Este pico le permite triturar semillas duras, arrancar brotes y manipular alimento con precisión, ayudado por su lengua prensil. Sus patas zigodáctilas —con dos dedos hacia adelante y dos hacia atrás— están adaptadas para trepar y sujetar objetos. Su sistema digestivo está optimizado para una dieta rica en fibras vegetales y lípidos. Posee una excelente capacidad vocal, con una amplia gama de llamadas, algunas estridentes. Su anatomía y fisiología están adaptadas a bosques tropicales de altitud media, donde encuentra alimento estacionalmente variable.
Es un ave diurna, inteligente y muy vocal. Durante la época reproductiva, suele observarse en parejas monógamas que anidan en cavidades naturales de árboles altos. Fuera de ese periodo, forma grupos pequeños y ruidosos que vuelan entre zonas de alimentación. Sus desplazamientos son estacionales y altitudinales, especialmente en busca de frutas maduras. Tiene un comportamiento social estructurado, donde las vocalizaciones cumplen funciones de cohesión y advertencia. Utiliza llamadas nasales, graznidos y chillidos variables según contexto. En cautividad, demuestra habilidades cognitivas elevadas, como reconocimiento de patrones, resolución de problemas y memorización de sonidos. Es territorial durante la crianza, y agresivo frente a intrusos. Durante el descanso, busca ramas altas y densas, y puede utilizar sitios específicos noche tras noche. Es un trepador ágil, poco terrestre, y muestra preferencia por forrajear en copas.
El loro corona lila está clasificado como En peligro (EN) por la UICN, con una población estimada entre 4.700 y 6.700 adultos maduros. Su distribución original se ha visto seriamente fragmentada debido a la deforestación, urbanización, agricultura intensiva y tala de árboles grandes necesarios para nidificar. Además, es una de las especies más afectadas por el tráfico ilegal de fauna silvestre en México, lo que ha reducido drásticamente su número, especialmente en estados como Nayarit y Jalisco. Está incluido en el Apéndice I de CITES, lo que prohíbe su comercio internacional sin permisos especiales. Aunque existen poblaciones asilvestradas viables en el sur de California, estas no sustituyen a las poblaciones silvestres originales ni resuelven la pérdida genética. Se han desarrollado iniciativas de educación y protección comunitaria, pero no existen aún programas de reproducción ex situ con reintroducción activa. La protección de hábitats y el control del tráfico siguen siendo prioritarios para evitar su extinción regional.
El nombre científico finschi honra al zoólogo alemán Otto Finsch, ornitólogo especialista en psitácidas.
La corona azul-lila es única dentro de su género y lo distingue de otros loros amazónicos.
Puede imitar sonidos humanos, aunque no es tan vocal como otras especies del género Amazona.
Se adapta bien a climas subtropicales secos, lo que explica su éxito en zonas urbanas como California.
Forma vínculos muy estrechos con su pareja, permaneciendo juntos durante años e incluso en cautividad.
Presenta una gran plasticidad dietética, aprovechando frutos silvestres y también cultivos como el maíz o el plátano.
En libertad, recorre varios kilómetros diarios entre dormideros y zonas de forrajeo.
Su nido puede ser reutilizado durante varios años si no es perturbado.
Las crías emiten llamadas nasales agudas y son alimentadas por ambos padres.
Es una de las pocas especies de Amazona con presencia histórica exclusivamente en México.
Su comercialización ilegal lo ha convertido en ave de compañía en diversos países, lo cual ha favorecido la aparición de poblaciones ferales.
A pesar de su belleza, no es común en zoológicos europeos debido a su estado legal protegido.
En algunas regiones rurales mexicanas se le conoce como “loro mexicano” o “loro lila”.
Puede vivir más de 25 años en condiciones adecuadas de cautividad, con registros que superan los 30.
Se ha observado que vocaliza más intensamente al amanecer y al atardecer, formando “coros” comunales.
En cautividad, puede llegar a deprimirse si se aísla socialmente o se le priva de estimulación.
En épocas de sequía, se ha documentado que puede modificar su dieta hacia hojas y flores.
La coloración de la corona se intensifica con la edad y es un posible indicador de madurez.